ER.- El inicio de un nuevo ciclo académico es un desafío para muchos estudiantes universitarios. Según el Ministerio de Educación (Minedu), el 82 % de los universitarios en Perú enfrenta ansiedad al comenzar las clases, siendo la ansiedad uno de los problemas de salud mental más recurrentes, que afecta al 85 % de la comunidad educativa universitaria. Ante esta situación, contar con estrategias de organización se convierte en un factor clave para reducir el estrés y mejorar el rendimiento académico.
Mauro Cerrón, coordinador de la carrera de Psicología de la Universidad Privada del Norte (UPN), explica que el inicio del ciclo es una oportunidad para adoptar hábitos efectivos que benefician tanto el desarrollo personal como profesional. “Es necesario aplicar técnicas efectivas de estudio para reducir el estrés y comenzar el año académico de la mejor manera”, destacó Cerrón.
Con el objetivo de ayudar a los universitarios a organizarse de manera efectiva, Cerrón compartió seis consejos prácticos para optimizar el tiempo y maximizar la productividad, sin descuidar la salud mental:
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Organizar el horario de estudio: Es fundamental destinar tiempos específicos para estudiar y descansar. La técnica Pomodoro, que consiste en estudiar durante 25 minutos y descansar 5 minutos, mejora la concentración y previene la fatiga.
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Desintoxicar el entorno digital: Limpiar la bandeja de entrada, organizar archivos en carpetas y desactivar notificaciones innecesarias. Un entorno digital ordenado reduce las distracciones y mejora la concentración durante el estudio.
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Priorizar las tareas: Clasificar las actividades según su urgencia e importancia. Herramientas digitales como Trello o Notion ayudan a gestionar los pendientes y visualizar las prioridades.
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Utilizar la regla de los 2 minutos: Si una tarea toma menos de 2 minutos, realícela inmediatamente. Este hábito ayuda a evitar la acumulación de pendientes y mantiene la lista de tareas más organizada.
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Aprovechar las herramientas digitales: Utilizar plataformas como Google Calendar o Microsoft To Do para establecer recordatorios de tareas y solicitudes, optimizando el manejo del tiempo.
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Cuidar el bienestar físico y mental: Incorporar pausas activas, practicar actividades recreativas, dormir lo suficiente, y mantener una alimentación equilibrada son esenciales para un rendimiento óptimo.
Cerrón destaca la importancia de un enfoque integral para el éxito académico: “Organizarse no solo significa gestionar el tiempo de estudio, sino también cuidar del bienestar físico y mental. Los estudiantes que logran este equilibrio desarrollan habilidades valiosas para su vida profesional”, finalizó.
