¿QUÉ ES EL COMPOSTAJE?

ER.-El compostaje es una técnica que consiste en aprovechar los residuos orgánicos para transformarlos, a través de un proceso biológico, en abono natural o compost, el cual ayuda a nutrir las plantas de su jardín o biohuerto. En ese sentido, Ambipar Environment Perú explica cómo se puede compostar para fomentar buenas prácticas ambientales:

  1. Seleccionar los restos de comida: Se puede utilizar las cáscaras de frutas y verduras, filtrantes de infusiones (sin recubierta), café molido, cáscaras de huevo, inclusive flores viejas, cartones de huevo, periódicos, hojas secas y hasta agujas de pino. La carne, los productos lácteos, la comida cocinada, aceitosa, mantecosa y huesos no forman parte del proceso de compostaje.
  2. Diferenciar residuos “frescos” de los “secos”: Existen dos ingredientes principales para la mezcla del compostaje. En primer lugar, están los residuos «frescos o húmedos” como restos de comida, cáscaras de frutas y verduras, poda fresca, etc., los cuales aportan nitrógeno al proceso de compostaje. En segundo lugar, están los residuos «secos» como aserrín, paja, hojas secas, cartón, etc., los cuales aportan carbono. Estos dos elementos (nitrógeno y carbono) son muy importantes para el equilibrio del proceso asegurando una buena proliferación de microrganismos que ayudan a la descomposición de los residuos.
  3. Reducir el tamaño de los residuos: Mientras más pequeño sea el residuo menor será el tiempo que tardará en descomponerse; por eso se deben triturar lo más que se pueda, para luego dejarlos en un recipiente de plástico con tapa. Se puede agregar una pequeña capa de aserrín con el fin de evitar atraer insectos y generar malos olores.
  4. Empezar a compostar: Colocar capas de residuos en un balde o compostera. Asegurarse de que los residuos secos estén en la parte inferior; y los frescos, en la superior. Esto permitirá que fluya el agua y el aire, y asegurará que los microrganismos puedan hacer su trabajo.
  5. Realizar el método del puño: Para evitar el exceso de humedad o malos olores en el compost, se debe tener en cuenta la proporción de residuos «secos» a «frescos» utilizados en la mezcla. Lo ideal es utilizar tres partes de secos por una parte de frescos. Para asegurar que la materia tenga la humedad adecuada, sujetar una porción de la mezcla de compost y proceder a apretarla a modo de puño, si caen de 3 a 5 gotas de agua, se está yendo por el camino correcto.
  6. Airear y girar la mezcla: La descomposición, con la ayuda del calor, podría tardar dos meses; sin embargo, en el frío, podría demorar hasta cinco meses. No obstante, para mantener las cosas en movimiento y agilizar este proceso, se debe mover y oxigenar la mezcla con un palo o una pala, y así dejar que el aire fluya. Acerca de la frecuencia para girar la mezcla, al empezar, se puede voltear una vez cada 7 a 10 días, y según cambie de textura a una más seca, se puede mover cada 10 a 14 días.
  7. Identificar que el compost está listo para usar: Para confirmar que el compost está listo, este debe desprender un olor agradable a tierra húmeda, con una textura esponjosa y un color marrón oscuro. De esta forma, estará listo para utilizarlo en las plantas, jardín o biohuerto.

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