¿EN QUÉ CONSISTE LA EFICIENCIA ENERGÉTICA?
ER.- El concepto de eficiencia energética se basa en un uso inteligente y responsable de los recursos considerando las posibilidades que aporta la tecnología, no solo a nivel de equipamiento, sino también de procesos que involucren a todo el grupo humano de las empresas. Esto hace referencia a un cambio de actitudes y comportamientos de forma gradual, que permitan mejores resultados.
“Uno de los beneficios más importantes de la eficiencia energética es el económico, el retorno de inversión, por lo general, se puede ver en el plazo de dos años. En Perú, aún podemos afirmar que esto es una tendencia, pues son muy pocas las empresas que se dedican a brindar este servicio”, puntualizó Nadia Romero Arguedas, Business Developer de Italtel Perú.
Según data local, el sector de mayor consumo de energía eléctrica en Perú es el industrial, seguido por el minero, residencial y comercial. No obstante, si establecemos un indicador de consumo tomando en cuenta la cantidad de clientes que manejan, el sector industrial-minero es el que se encontraría en primer lugar en cuanto a consumo, seguido por el comercial.
AHORRO DE ENERGÍA
En el mercado peruano, la cantidad del ahorro que se puede lograr suele ser muy variable en función del cliente y el sector en el que se encuentre, además del tipo de implementación que se realice. Sin embargo, se puede llegar a obtener un ahorro de hasta 40% con soluciones tecnológicas de control y un 25% solo con gestión y monitoreo.
En aeropuertos, el ahorro puede llegar a ser del 13%, mientras que los centros comerciales alcanzarían un 12%. En contraste con un 18% que se podría obtener en edificios corporativos, y un 16% en retail, únicamente con gestión energética.
“El ahorro se basa en la implementación de soluciones como la iluminación LED inteligente, el uso de termostatos/interruptores inteligentes, dispositivos de ahorro en refrigeración y controladores de aire acondicionados, entre otros.”, indicó la ejecutiva.
El verdadero ahorro de energía solo se verá reflejado en su totalidad, si los colaboradores de la empresa están realmente dispuestos a participar de este proceso. Resulta imprescindible desarrollar un plan que busque concientizar sobre el consumo responsable de los recursos. Aún más importante es que los trabajadores vean a las cabezas de la organización interiorizar estas nuevas políticas y llevarlas a cabo en su día a día.
Pequeñas prácticas como el evitar dejar las luces prendidas cuando no se están usando, apagar el aire acondicionado o la calefacción, pueden conllevar a un gran beneficio. En ese sentido, las empresas pueden organizar distintas acciones como pequeños concursos entre áreas que promuevan estos nuevos hábitos en su comunidad.