ER.-Adoptar un perro o un gato es una de las decisiones más gratificantes que una persona puede tomar, pero también implica una gran responsabilidad. En el marco de una tendencia creciente hacia la adopción responsable de mascotas, MSD Animal Health, empresa líder en salud animal, comparte una serie de recomendaciones esenciales para quienes están por convertirse en “padres perrunos o gatunos”.
“La decisión de ser tutor de un perro o gato debe tomarse con la misma seriedad que cualquier otra responsabilidad parental. Estos seres dependen completamente de nosotros para su bienestar físico y emocional”, explicó Silvia Panta, Representante Técnica de la Unidad de Animales de Compañía de MSD Animal Health en Perú.
Cinco consejos para una adopción responsable
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Chequeos veterinarios periódicos
Visitas regulares al veterinario, un calendario de vacunación actualizado y una correcta desparasitación interna y externa son fundamentales. La prevención es siempre más efectiva —y económica— que el tratamiento de enfermedades ya desarrolladas. -
Evaluar el estilo de vida
No todas las razas tienen las mismas necesidades. Hay que elegir una mascota cuyo nivel de energía, tamaño y temperamento se ajusten a la rutina y al espacio disponible del futuro tutor. -
Considerar el presupuesto
La tenencia responsable implica gastos continuos en alimentación, salud, higiene y posibles emergencias. Hay que tener en cuenta que un perro o gato puede vivir entre 10 y 15 años, dependiendo de su raza. -
Establecer rutinas claras
Una rutina de alimentación, paseos, juego y descanso ayuda a la mascota a adaptarse y sentirse segura, especialmente durante sus primeros meses en el nuevo hogar. -
Fomentar la socialización temprana
Exponer a la mascota a distintos entornos, personas y animales desde cachorro es clave para prevenir comportamientos indeseados y desarrollar un compañero equilibrado y sociable.
Un vínculo basado en el afecto y el compromiso
Desde MSD Animal Health recuerdan que la relación con una mascota es un vínculo de por vida. “Requiere preparación y conciencia, pero ofrece una relación profundamente enriquecedora, basada en el cuidado mutuo y el afecto incondicional”, concluyó Panta.
