¿CUÁLES SON LAS BARRERAS QUE ENFRENTAN LAS MUJERES AL DENUNCIAR UNA SITUACIÓN DE VIOLENCIA?
ER.-Avon y la Fundación Avon para la Mujer, de la mano con Quiddity; realizaron una investigación que determinó que un 85% de las mujeres transitan al menos una vez, por una situación de violencia de género ya sea física, sexual, simbólica, psicológica y/o económica.
Asimismo, desde el inicio de la pandemia, los países de todo el mundo han presenciado un aumento alarmante de las denuncias de violencia contra las mujeres, tan solo en Perú hasta agosto del 2022, más de 105 mil mujeres fueron atendidas en los Centros de Emergencia Mujer (CEM), por sufrir algún tipo de agresión por parte de sus parejas o exparejas.
«La violencia contra las mujeres y las niñas es la violación de los derechos humanos más extendida en el mundo y, a menudo se oculta a puerta cerrada. Desde hace más de 15 años, Avon colabora con organizaciones benéficas de todo el mundo para hacer frente a la violencia de género. Este año hemos puesto a disposición alrededor de $1 millón a más de 35 ONGs que luchan contra la violencia doméstica en todo el mundo”, comentó Julián Vélez, gerente general de Avon.
BARRERAS QUE ENFRENTAN LAS MUJERES AL PEDIR AYUDA:
- Miedo a las consecuencias: Un 40% de las encuestadas expresó tener miedo a las consecuencias y un 25% indicó que tiene temor directo a recibir amenazas.
- Tener hijos/as y/o personas a cargo: esta barrera representa una dificultad importante a la hora de ingresar y/o permanecer en la Ruta Crítica, ya bien sea por no tener con quién dejarlos a cuidado, porque el vínculo con los hijos/as puede verse afectado o porque puede significar un peligro para ellos.
- Vergüenza: La pregunta que muchas se realizan y que simboliza la vergüenza experimentada es «¿Cómo puede ser que esto me esté pasando a mí?».
- Desconfianza en las autoridades y círculo: Algunas manifiestan haber recibido maltratos por parte de entidades policiales y/o judiciales, que se manifiesta de diversas maneras: no les creen, las someten a largas esperas o les piden que vuelvan en otro momento, tornándose un proceso muy burocrático que las obliga a volver a contar sus vivencias.
- Dependencia económica: esta barrera es propiciada principalmente por el mismo agresor, quien rechaza que la mujer trabaje por fuera del ámbito doméstico (dinámica de aislamiento) y al mismo tiempo, le restringe el acceso al dinero que solo él produce. La manipulación puede presentarse de la siguiente manera primero, el agresor cuestiona que la mujer quiera independizarse económicamente “¿Pero por qué vas a trabajar?”, “si con lo que yo gano nos alcanza» y luego, cuando la persona que sufre violencia busca ayuda o pienso en separarse, la pareja le replica “¿Y cómo te vas a mantener sola?”