COCA-COLA RECIBE PREMIO NACIONAL AMBIENTAL POR INICIATIVA EN OXAPAMPA

ER.- El Ministerio de Ambiente otorgó a Coca-Cola Perú el Premio Nacional Ambiental 2017, en la categoría Perú Natural, con mención en protección y recuperación de ecosistemas y especies, por su proyecto de reforestación y conservación de cuencas hidrográficas en la Reserva de Biosfera de Oxapampa-Asháninka-Yánesha.

La Compañía recibió este premio por  impulsar la gestión participativa en las zonas de interés hídrico en la Reserva de Biosfera de Oxapampa, en el departamento de Pasco. El programa puesto en marcha en el 2014 por Coca-Cola, en alianza con Fundación AVINA y el Instituto del Bien Común, busca proteger y reforestar los bosques para que, a través de la gestión del ecosistema, se logre el mantenimiento de los caudales de los ríos, preservando las fuentes de agua y garantizando así el acceso al recurso hídrico a las poblaciones de la zona.

“Para Coca-Cola Perú, es un orgullo recibir este importante premio. Nos impulsa a seguir trabajando por el bienestar integral de las comunidades y cuidar el medio ambiente, liderando iniciativas sostenibles que contribuyen al progreso del país. Crear valor en las comunidades, en el medio ambiente, y promover el desarrollo sostenible del país está en el ADN de la Compañía”, declaró Evangelina Suárez, gerente General de Coca-Cola Perú.

Gracias a la capacitación de agricultores y ganaderos en actividades agropecuarias sostenibles, el programa ha conseguido evitar la deforestación de 1.000 hectáreas de bosques en las zonas proveedoras de agua de Oxapampa, y reforestado 700 hectáreas de bosque ribereño en las cuencas de los ríos Pichis y Huancabamba. Con estas acciones Coca-Cola ha logrado reponer más de 3 millones de metros cúbicos de agua, reabasteciendo a la naturaleza el 100% del agua que utiliza en sus productos terminados, lo cual es parte del compromiso ambiental de la Compañía.

El Premio Nacional Ambiental Antonio Brack Egg (PNA-ABE), es entregado anualmente con el fin de alentar el ejercicio de una ciudadanía ambiental responsable a quienes contribuyen con la conservación y el aprovechamiento sostenible de los recursos naturales y la biodiversidad, evitan la degradación de los ecosistemas y/o mejoran la calidad ambiental; constituyéndose en paradigmas, susceptibles de ser replicados por otros ciudadanos y por el Estado.

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